viernes, 17 de julio de 2015

Quiénes nos respaldan?

Desarrollados por el Laboratorio Biofarma Natural CMD, ubicado en Guadalajara, Jalisco, tiene más de 15 años en el diseño y la fabricación de suplementos alimenticios y remedios herbolarios. Cuenta con la norma oficial mexicana (nom-059-ssa1-1993) referente a las buenas prácticas de fabricación para establecimientos de la industria químico farmacéutica, dedicados a la fabricación de medicamentos.

¿Que es el Sello Kosher?

Quizá usted no lo sepa, pero si echa un vistazo en su despensa es muy posible que encuentre algunos. Es más, es casi seguro que usted y su familia los consumen todos los días: se trata de los alimentos kosher, los únicos permitidos para servirse en una mesa judía religiosa.

Aunque el término
 kosher es mundialmente conocido en el terreno de la alimentación, tal vez muchos de nosotros ni siquiera lo habíamos escuchado, así que comencemos por definirlo: la palabra kosher es de origen hebreo y significa “apto” o “adecuado”, y describe, precisamente, a todos aquellos alimentos que se consideran apropiados para consumirse de acuerdo con lo establecido en la Toráh (el Antiguo Testamento).

Y es que las normas dietéticas judías son muy estrictas, por ejemplo:
 
·          Sólo se permite el consumo de animales que tengan pezuñas partidas y que sean rumiantes; por ejemplo res, borrego, cabra, carnero, pollo, pavo, pato y ganso. De comer cerdo ni hablar, eso se considera un pecado grave.
·         No se permite el consumo de sangre del animal.
·         Para que un pescado sea kosher debe tener escamas y aletas, de lo contrario no se puede consumir. Los mariscos quedan absolutamente prohibidos.
·         Y uno de los mandatos más importantes: “jamás mezclar carne con leche”. La prohibición de la Toráh es estricta: no cocinar y/o consumir juntos estos productos. Si un judío religioso come carne, tiene que esperar seis horas para poder beber o comer cualquier producto lácteo, y si primero consume leche se debe enjuagar la boca con agua para poder comer carne.
 El seguimiento de este regimen alimenticio por parte de los judíos muy religiosos es tan estricto que para ellos una cocina kosher debe tener utensilios para cocinar carne y pollo y otros para leche. Por ejemplo, no se puede cortar carne con el mismo cuchillo que partió un queso (y viceversa). Incluso al momento de lavar los platos deben utilizarse escurridores, esponjas y toallas diferentes para los platos destinados a la carne y para los que contenían leche. Usted se preguntará el porqué de estos mandamientos. Pues bien, el rabino Meir Antebi, de la Comunidad Judía Azhkenazi de México, responde:
“En la Biblia, Dios ordenó qué alimentos, qué clase de animales y en qué forma podemos comer. Es ley sin motivo, no hay ningún razón, simplemente es una orden de Dios en la que nosotros confiamos y seguimos fielmente.

Es algo estrictamente religioso”. Así, los judíos religiosos en todo el mundo se han mantenido fieles a estos principios y observan estas tradiciones milenarias desde su infancia, y son ellos los consumidores por excelencia de los productos kosher, aunque no los únicos, como veremos más adelante.
La “personalidad” de lo que comemos
Sería imposible explicar en tan corto espacio todos los detalles de las restricciones y requisitos que comprenden los alimentos kosher, pero sí podemos hacer una breve revisión de los aspectos más importantes y hacer una clasificación general de ellos.

Veamos:
Carnes. En esencia, la carne kosher es la misma que consume la mayoría de la gente, pero con estrictos controles de calidad e higiene. Lo primero es el sacrificio: el animal debe ser degollado con un cuchillo extremadamente delgado y filoso para asegurar el mínimo sufrimiento del animal y su muerte instantánea. Dicho proceso es realizado por un rabino shojet, quien es un especialista en el sacrificio. Una vez abierto, se inspecciona el perfecto estado del hígado, pulmones, sesos y menudencias para asegurarse de que el animal no tenía daño alguno. En total, en el caso de las reses, el shojet revisa 70 aspectos para asegurarse de que sea kosher. En cuanto a las aves, la inspección es igual de minuciosa. Por último, la carne es untada de sal para que ésta absorba la sangre (los judíos no pueden comerla) y se lava para poder consumirla.Lácteos. El sistema kosher exige que la leche sea pura de vaca y que, por supuesto, en ningún momento y de ninguna manera se mezcle con carne, por lo que productos como los quesos y la margarina (debido a que en su elaboración pueden entrar en contacto con productos cárnicos) requieren también de certificación kosher.Pareve (neutro). Se les denomina así a los alimentos que no contienen carne ni ingredientes lácteos. Así, todas las frutas, granos y vegetales en su estado natural son kosher pareve.
Aun después de lo ya expuesto, tal vez persista en usted la pregunta: ¿por qué seguir ese régimen tan estricto? Además del sentido absolutamente religioso y de salud que significa consumir alimentos kosher, existe otro aspecto que motiva el acatamiento de estas normas alimenticias: en las leyes dietéticas hebreas existe la firme creencia de que el alimento no sólo brinda al organismo los nutrimentos necesarios para fortalecerse, sino que también tiene una influencia determinante sobre la personalidad y el alma, es decir, que propicia de manera directa cambios en el comportamiento y la conducta de las personas.

“La comida influye sobre la salud personal, y no hablo sólo de salud física, hablo también de la salud moral: la comida influye sobre cualidades de la persona. Para nosotros, una persona que come comida kosher, comida permitida por la Biblia, tiene una clase moral distinta que le permite una mejor convivencia con las personas que están a su alrededor”, comenta el rabino Antebi.


Otro de los beneficios que las empresas reciben al obtener el sello kosher es posicionar sus productos como saludables para el público en general. Por ejemplo, el rabino Antebi afirma:
“Nosotros podemos comer cualquier tipo de frutas y verduras, pero tenemos que cuidar que no tenga gusanos. Cuando inspeccionamos un camión lleno de chiles y le encontramos tres gusanos, ese camión, y todos esos chiles, ya no pueden ser kosher”. Así, el sistema kosher también hace hincapié en la limpieza y pureza de los productos, lo que le ha ganado muchos adeptos.

 En la actualidad, los alimentos kosher no son de consumo exclusivo de la comunidad judía ortodoxa, personas con otras creencias religiosas (como los musulmanes), vegetarianos,  intolerantes a la lactosa y otros consumidores en general compran estos alimentos, derivados del profundo compromiso de los judíos con sus creencias.

Y así debemos entenderlo, como una manifestación más de las múltiples que podemos encontrar en los distintos grupos religiosos que hay en nuestro país, y que podemos aprovechar como una garantía más de calidad en los productos.

“Los productos kosher son para todo el mundo, de la religión que sea. Hoy, para la gente en general, Kosher es un logotipo que garantiza limpieza, calidad y salud”.

¿Que es el sello USDA Organic?

El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos permite el uso de este sello únicamente en los productos que están certificados por agencias independientes autorizadas por esta institución y que cumplen con los estrictos estándares que establece el Programa Nacional Orgánico (NOP) Auspiciado y guiado por la dirección del Servicio de Mercadotecnia Agrícola (Agricultural Marketing Service).

Al ostentar este sello, se le da a los consumidores la seguridad de que la producción está evaluada por una agencia autorizada que verifica el cumplimiento estricto de los estándares orgánicos

Los estándares contenidos en las leyes que regulan a las instituciones certificadoras, consideran entre otros aspectos:

- El uso tierras de producción, en donde NO han sido utilizados químicos sintéticos por un tiempo mínimo de tres años.
- Mantener registros documentados de todo lo que se aplica a la tierra.
- Guardar superficies de por medio con respecto a otros campos cercanos que no se administran bajo los estándares orgánicos.
- Se evitan los organismos modificados genéticamente (transgénicos) y químicos sintéticos como fertilizantes, pesticidas, antibioticos o aditivos de ese tipo en los productos
- Revisiones períodicas (al menos una vez al año) de una agencia independiente autorizada.
- Mantener una estricta separación física entre los productos certificados y los que no lo están
- Asegurar la calidad del agua utilizada para el riego y para el lavado de los productos.
- Evitar la contaminación desde el proceso productivo hasta la comercialización.
- Planificar y realizar de forma documentada, prácticas conservacionistas de agua y suelo, considerando todo el medio ambiente y demás seres vivos.


Como has podido ver el que nuestros productos 
estén certificados por estos 2 sellos te garantiza la máxima higiene y calidad que un producto alimenticio como los nuestros debe tener.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario